las lámparas infrarrojas entraría dentro del ámbito de la termoterapia, un conocido método de tratamiento de dolencias y enfermedades a través de la
aplicación de calor.
El calor que irradia la lámpara produce la dilatación de los vasos sanguíneos y en consecuencia aumenta el flujo de sangre en las áreas perjudicadas. Esta luz puede
traspasar la capa de la piel hasta 3 centímetros y con esto consigue actuar de forma directa
sobre músculos, arterias y venas.
1sesión 10€